viernes, 30 de septiembre de 2011

Camino



Bajo un cielo que sueña
con nubes y aguaceros
y viento y pájaros,
el camino atraviesa
en mitad del silencio
los campos yertos.

Busca en el horizonte
de lomas pardas
el verdor de unos trigos
que ya se fueron
y respira profundo
mientras añora
donde viven los árboles.

El camino no sabe,
porque nadie le ha dicho,
que no llegará lejos.

4 comentarios:

isidro dijo...

que triste no? quieres decir que todo es inútil?, que por mucho que respire y se ahonde por lo profundo ese camino,no llegará? a mi, que me siento camino, me has dejado sin esperanza.

Manuel Arriazu dijo...

Puede que tengas razón y que haya quedado un poco triste, pero a mí, Isidro, este paisaje me inunda de un sentimiento que a veces me sobrecoge. No pensé que alguien pudiera interpretar lo que tú, aunque lo releo y siento que tienes razón. Eso sí, es cierto que el camino, este en concreto, no llega lejos. Los que lo hemos recorrido sabemos que acaba un par de kilómetros más allá. A veces nosotros tampoc sabemos... Ya lo hablaremos.
Saludos. Y gracias por comentar.

Mila dijo...

Manolo, el poema me recuerda un cierto tono machadiano, propio de tu estilo, pueblo y paisaje, incluso en el camino en sí mismo.
Isidro, Manolo, ¿todo lo que acaba es triste? ¿es mejor conocer el final o no? El camino, ¿es feliz buscando en el horizonte lo que no encuentra en el sendero? ¿La búsqueda le llena, consiga o no su meta?

Manuel Arriazu dijo...

Gracias, Mila, por apreciar el poema y darnos tu opinión. Quizás lo que ocurre (ahora que lo pienso...) es que la expresión "no llegar lejos" o "no llegar muy lejos" se ha contaminado de otros sentidos menos positivos y le proporciona al poema, quizás lo hace, ese tono gris y pesimista que Isidro le halla. Por lo demás, tienes razón, Mila, que todo no ha de ser tristeza en lo que termina, ni, mucho menos, en lo que está por llegar.